¿Sabías que el helado de pistacho sabe a pistacho?

Obvio, ¿no?

 

Tú vas a la heladería, pides un helado de limón y sabes que su sabor te recordadrá al limón. Lo mismo con un helado de fresa, otro de vainilla o el de Oreo. 

 

Cuando estuve en Bolonia en febrero me recomendaron varias heladerías. Y, sobre todo, que probara el helado de pistacho. 

 

No problem. Me encantan los helados y me encanta el de pistacho.

 

Me comí varios helados y varios de ellos, de pistacho. 

 

Y por PRIMERA VEZ EN MI VIDA (esto es totalmente en serio), el sabor de ese helado me recordó al pistacho. 

 

Más concretamente, a los pistachos que me comía con mi abuelo los sábados mientras veíamos “El Equipo A” y esperábamos a que el arroz al horno estuviera preparado. 

 

También me dijeron que el helado de heladería de verdad, el bueno, el auténtico, siempre está tapado con una cápsula de metal. Cuando eliges sabor, el maestro heladero lo abre, lo pone y lo vuelve a cerrar. 

 

Cosas de helados. 

 

Me he acordado de esto no porque me haya comido un helado, sino porque todavía hay mucha gente que cree que el copywriting no sirve para vender. Que importan otras cosas (diseño, producto, SEO, redes sociales) y que el copywriting bueno, está bien pero no aporta tanto. 

 

Mi opinión: 

 

El copywriting vende igual que el helado de pistacho sabe a pistacho. 

 

Si el copywriting no vende, está mal hecho; si el helado de pistacho no sabe a pistacho, está mal hecho. 

 

Normalmente vas a encontrar mucho copywriting mal hecho. Textos que son iguales unos a otros, emails sin personalidad y estrategias que están calcadas las unas de las otras. 

 

Este copy no vende, claro. O no todo lo que debería. Sin embargo, cuesta mucho menos de hacer (a nivel de tiempo y de dinero) que un buen copy. 

 

Para aprender a apreciar un buen copy (igual que un buen helado) hay que probar muchos. Yo he leído muchísimos. Es a lo que me dedico cada día. 

 

Copys buenos y copys malos. Copys de España, de Latinoamérica y de Estados Unidos. Copys en inglés y copys en español. Copys de turismo, de inversiones inmobiliarias y de productividad. De ahora y de hace 50 años. 

 

Copywriting con tiempo y resultados

 

Un abrazo

 

Ricardo

 

PD: Ahora mismo, cada mañana, antes de encender el ordenador, tengo un libro de Bob Serling con algunos de los mails y cartas de venta más vendedoras de Estados Unidos comentadas por los copywriters que los crearon. No digo lo que cuesta ese libro por miedo a lo que me diga mi madre.